El zinc se encuentra en las células por todo el cuerpo. Es necesario para que el sistema de defensa del cuerpo (sistema inmunitario) funcione apropiadamente. Participa en la división y el crecimiento de las células, al igual que en la cicatrización de heridas y en el metabolismo de los carbohidratos.
Los síntomas de la deficiencia de zinc incluyen:
- Infecciones frecuentes.
- Pérdida de cabello.
- Problemas con el sentido del olfato.
- Acné y alergia.
- Dificultad en el crecimiento y en la reproducción.