La hepatitis es una inflamación del tejido hepático (del hígado). Hay varias causas. Es posible que la gente haya oído hablar de las hepatitis A, B y C, que son infecciones del hígado causadas por los contagiosos virus de la hepatitis.
La hepatitis no es común en los niños, especialmente la hepatitis que no está relacionada con uno de los virus de la hepatitis. Por eso se han señalado que estos casos podrian tener como origen una relación con el adenovirus y el covid19 hasta ahora. No hay muchos casos, pero son lo suficientemente significativos como para justificar una investigación más profunda.
¿Los padres sobre qué síntomas deben estar atentos?
Los síntomas iniciales de la hepatitis son inespecíficos, lo que significa que muchas personas presentan estos síntomas por otras causas. Algunos síntomas son: náuseas, vómitos, dolor abdominal, fiebre, fatiga, pérdida de apetito y dolor en las articulaciones. Los signos posteriores incluyen orina oscura y heces de color claro, así como ictericia, es decir, cuando la piel y el blanco de los ojos se vuelven color amarillo.
¿Cuándo recurrir a su médico?
Muchos niños padecen enfermedades virales que pueden causar molestias gastrointestinales, fiebre y fatiga. Si tu hijo no puede retener líquidos, es una señal de que debes ponerte en contacto con su médico. Además, si los síntomas son persistentes y no mejoran, o si tu hijo empieza a estar aletargado, ponte en contacto con tu médico.
¿Cómo prevenir estos casos de Hepatitis?
Como la causa sigue siendo desconocida, no podemos decir qué medidas ayudarán a prevenirlos. Si, efectivamente, hay una relación con el adenovirus, entonces serían útiles las mismas estrategias que hemos estado utilizando a lo largo de la pandemia de coronavirus, como lavarse bien las manos con agua y jabón e instar a la gente a quedarse en casa cuando esté enferma.